Si se está preparando para comprar un nuevo sistema de calefacción para su hogar, probablemente se haya topado con el término "bomba de calor" en su búsqueda de información en Internet. Aunque mucha gente no está familiarizada con este tipo de equipo de calefacción, ventilación y aire acondicionado, las bombas de calor se utilizan para la calefacción y refrigeración de viviendas desde hace más de 50 años. Además, con el tiempo se han vuelto aún más eficientes desde el punto de vista energético.
¿No está seguro de si una bomba de calor es adecuada para usted? A continuación se lo explicamos:
¿EN QUÉ SE DIFERENCIA UNA BOMBA DE CALOR DE UN HORNO?
La mayor diferencia entre una bomba de calor y un horno es que una bomba de calor puede enfriar y calentar su casa. Si necesita sustituir la caldera y el aire acondicionado, en lugar de comprar ambos, puede adquirir una bomba de calor.
Cómo funcionan las bombas de calor: Una explicación básica
Al igual que un aparato de aire acondicionado, una bomba de calor contiene refrigerante. Ese refrigerante absorbe el calor ambiente (tierra, aire, agua, etc.). Si quiere enfriar su casa, el ventilador expulsa ese calor al exterior. Si quiere calentar la casa, el ventilador traslada el calor al interior.
Un horno utiliza electricidad o combustión (con gas o gasóleo) para generar calor en el interior de su vivienda. Este método es menos eficiente que el proceso de una bomba de calor, y además produce más contaminación.
¿CUÁLES SON LAS VENTAJAS DE TENER UNA BOMBA DE CALOR?
La sustitución de la caldera por una bomba de calor tiene múltiples ventajas que muchos propietarios desconocen.
Un sistema, dos funciones
Como se ha mencionado anteriormente, puede beneficiarse de poseer un sistema que realice tanto la calefacción como la refrigeración. Esto significa que, en lugar de necesitar un mantenimiento anual para la caldera en otoño y para el aire acondicionado en primavera, solo necesitará una cita de mantenimiento anual para cubrirlo todo.
Una alternativa segura y más ecológica a los hornos de gas y gasóleo
Las bombas de calor son una alternativa más eficiente desde el punto de vista energético, segura y respetuosa con el medio ambiente que las calderas de gas y gasóleo. Como funcionan con electricidad, no generan los subproductos nocivos de la combustión (quema de gas o petróleo). Esto significa que no tiene que preocuparse por el monóxido de carbono o las fugas de gases de escape que empeoran su calidad interior. Tampoco tiene que preocuparse por fugas de gas, retrasos en el encendido y problemas de combustión que requieran reparación.
Mayor confort con menor consumo de energía
Según el Departamento de Energía, las bombas de calor pueden reducir el consumo de energía entre un 30% y un 60%. Durante las estaciones de refrigeración, las bombas de calor controlan mejor la humedad que un aire acondicionado normal. Un mejor control de la humedad significa que el sistema puede enfriar su casa más rápido y mantenerla confortable con menos energía.